La crisis política en Bolivia se intensifica con las duras acusaciones del presidente Luis Arce contra Evo Morales, a quien responsabiliza de impulsar bloqueos de caminos para forzar una «sucesión presidencial» que le permita habilitar su inconstitucional candidatura. Mientras Morales califica la semana como «decisiva» y una «batalla final», el actual mandatario descarta renunciar, asegura que no se repetirán los «errores de 2019» que llevaron a la muerte y denuncia una estrategia de estrangulamiento económico a través del bloqueo de créditos en la Asamblea.
Morales dobla presión sobre Arce: «Esta semana se juega pueblo versus imperio»
Desde el Chapare, donde afirma estar «autoconfinado» para no ser aprehendido, el expresidente Evo Morales ha elevado el tono del conflicto, asegurando que el país vive un momento histórico. “Esta semana es decisiva (…) se juega pueblo versus imperio, imperio versus pueblo”, afirmó en su programa radial.
Morales, quien busca revertir el fallo constitucional que lo inhabilita como candidato, sostiene que la lucha no es solo por la democracia o la economía, sino por los recursos naturales. Agradeció el respaldo de sus bases, que impulsan bloqueos para presionar al Tribunal Supremo Electoral (TSE), e insiste en la existencia de un «plan negro» orquestado por Estados Unidos para proscribirlo políticamente.
Arce acusa a Morales: «El único objetivo es que yo renuncie»
En una contundente respuesta, el presidente Luis Arce descartó cualquier posibilidad de dimitir y desveló lo que considera el verdadero plan de su predecesor. «El único objetivo que tienen es que yo renuncie para que se dé, entre comillas, una sucesión presidencial y él (Morales) pueda habilitarse nuevamente como candidato», fustigó Arce.
El jefe de Estado señaló que esta estrategia es «inconstitucional» y que el «capricho» de Morales por perpetuarse en el poder ya tuvo consecuencias fatales en el pasado. Acusó al exmandatario de dirigir ataques personales y difundir calumnias con el único fin de recuperar el poder, incluso «arriesgando la vida de otros para su beneficio personal».
El bloqueo de créditos como arma de estrangulamiento económico
Arce conectó directamente los bloqueos de caminos con la parálisis en la Asamblea Legislativa, donde el ala «evista» y la oposición han frenado la aprobación de créditos internacionales cruciales para la economía.
“Lo venimos reclamando hace dos años y medio, y siempre nos han negado desde la Asamblea (…) solo buscan bloquear y estrangular al gobierno nacional”, afirmó. Según el mandatario, hay $us 1.849 millones en créditos pendientes que podrían aliviar los problemas económicos, una solución que, según él, hasta los precandidatos de la oposición reconocen.
Arce culpa a Morales por hechos de 2019
El presidente recordó la crisis de 2019 como una advertencia directa. “Ha habido muertes en el país producto de ese capricho (de la reelección). No vamos a volver a repetir esos errores”, declaró, asegurando que su gobierno no permitirá que la candidatura de Morales, sin «asidero constitucional», divida nuevamente a los bolivianos.
Calificó los bloqueos de «criminales» y los atribuyó a una estrategia que busca «muerte, luto y dolor». En este contexto, anunció que los operativos coordinados entre las Fuerzas Armadas y la Policía Boliviana continuarán para restablecer la circulación y la normalidad, especialmente en Cochabamba, el epicentro del conflicto.
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